A partir del 2014 la violencia contra lesbianas, homosexuales, bisexuales y trans en Chiapas, incrementó hasta un 50 por ciento. Se han documentado desapariciones, agresiones y asesinatos con una saña brutal, sin que las autoridades hagan justicia a las víctimas.
Darwin Pereyra Vázquez, de la Red Mesoamericana de Apoyo al Migrante LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y trans), denunció el preocupante incremento de agresiones y desapariciones de personas de este sector poblacional en algunos municipios como Mazatán, Villaflores, Tapachula, San Cristóbal de las Casas y otros.
“Vemos que si antes eran estranguladas, ahora son 40, 50 puñaladas, las queman, la última chica asesinada tenía muchos traumatismos que le provocaron la muerte. Vemos que el odio en contra de esta población ha incrementado”, declaró.
Puntualizó que en lo que va del año han documentado seis crímenes de odio contra personas disidentes sexuales, de los cuales tres fueron en Villaflores y uno Tapachula, en este último municipio también han documentado agresiones a personas trans trabajadoras sexuales originarias de Centroamérica.
Sobre las agresiones, dijo que tres de las víctimas continúan hospitalizadas ante la gravedad de sus heridas y traumatismos.
El gobierno saliente deja una cuenta pendiente, porque prácticamente ningún caso de homicidio ni agresión ha sido resuelto a favor de las víctimas. No se ha dado la justicia merecida. Ni siquiera en los casos que trascendieron en los medios de comunicación y hubo presión social, ni se diga de aquellos que no son documentados.
Afirmó que las autoridades no dan argumentos para los procesos fallidos e incompletos de estos crímenes, simplemente no se interesan en ellos. Las autoridades no saben de forma concreta el índice de crímenes de odio por orientación sexual e identidad de género. Prevalece la violencia institucional.
El activista, refirió el caso de un chico en Villaflores, desaparecido desde hace cinco meses. Sus familiares no saben nada de él, si sigue vivo, y en caso de que no, en donde están sus restos.
Otro caso ocurre en Mazatán, el joven Federico Ramírez mejor conocido como “La Kika”, está desaparecido desde junio. Su familia ya denunció públicamente la opacidad y omisión de las autoridades para investigar el paradero de su familiar. A la fecha no saben nada de él.
A principios de noviembre, se dio un caso más, con la desaparición de Ociel Gutiérrez, de 23 años de edad, originario de Arriaga. Su familia también ha denunciado que el Ministerio Público y la Policía no han mostrado interés en el caso.
Mencionó que en San Cristóbal de las Casas se han registrado varios casos de personas de la disidencia sexual, que han sido violadas y torturadas, para después ser abandonadas.
En Villaflores, tres homosexuales han sido asesinados a pedradas en los últimos ocho meses.
Como activistas LGBT, consideran que la omisión y desinterés de las autoridades se debe a la identidad de género y orientación sexual de las víctimas, lo que conlleva a un incremento preocupante, que evidencia a su vez un Estado sin tolerancia, homofóbico y transfóbico.
Es una situación alarmante e indignante el saber que una persona LGBT puede ser desaparecida, agredidas e incluso asesinada, sin que las autoridades realicen las investigaciones pertinentes para dar con los responsables y hacer justicia.
“A los activistas nos preocupa el hecho de no saber dónde están, y porque las autoridades no prestan atención como en cualquier otro caso”, finalizó.
Publicado por NoticiasVi.com