San José, 30 nov (elmundo.cr) – La Junta Directiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) aprobó ayer, el protocolo de atención integral de personas trans para la hormonización en la red de servicios de salud, el cual pretende brindarles atención integral a las personas transexuales.
El doctor Román Macaya Hayes, presidente ejecutivo de la CCSS, definió la aprobación del máximo órgano institucional como una decisión histórica que salda una deuda de Derechos Humanos con este sector. El jerarca aseguró que este acuerdo institucional responde al clamor mundial de defensa de los Derechos Humanos.
Por su parte, el doctor Roberto Cervantes Barrantes, gerente médico de la institución, aseguró que este hito de la Junta Directiva hace que la CCSS procure ajustar la prestación de los servicios a la población, desde sus propias necesidades y no a la inversa.
Las personas trans pueden solicitar la atención desde el primer nivel de atención y allí serán referidos al servicio de Psicología, con el propósito de detectar posibles alteraciones de fondo. Una vez pasado este tamiz son referidos a los servicios Endocrinología para que el especialista realice el diagnóstico y prescriba el tratamiento hormonal que recibirán las personas. La institución acompañará al paciente en todo el proceso.
La autoridad médica de la CCSS dijo que se espera que, para el primer trimestre de 2019, se haya capacitado al personal en todo el país para la aplicación de este protocolo, que tiene por objetivo la no discriminación hacia esta población.
La capacitación tiene como ejes temáticos la sensibilización y el buen trato para una atención con calidad, la socialización del protocolo de hormonización y del protocolo de buen trato y atención clínica y terapéutica.
“Nos estamos asegurando que estos hombres y mujeres no sufran consecuencias graves por su condición. Nosotros como institución estamos trabajando para que estas personas utilicen tratamientos prescritos por un especialista, con la seguridad, calidad debida y vivan una vida plena”, aseguró el gerente.
El médico explicó que en ocasiones estas personas utilizan medicamentos para realizarse el proceso sin supervisión médica, muchos de los tratamientos utilizados son de uso veterinario, los cuales pueden generar serias complicaciones para su salud, consecuencias que son atendidas en los hospitales públicos, elevando adicionalmente, el costo de la atención.
El objetivo de la terapia hormonal es inducir los cambios físicos que coincidan con la identidad de género y la meta del tratamiento es mantener los niveles hormonales en los rangos normales fisiológicos del género deseado.
La decisión de la Junta Directiva va en concordancia con lo actuado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que, en junio pasado, publicó la nueva clasificación de enfermedades que llevará al debate en la asamblea general del organismo el año que viene. La ICD-11, el nombre de la clasificación tiene, como una de sus principales novedades, que saca la “incongruencia de género” -la transexualidad- de la clasificación de las enfermedades mentales.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos en su informe de Violencia contra las Personas LGBTI hace hincapié en la importancia de reconocer la autodeterminación de personas como un principio rector en Derechos Humanos. Según esa Comisión es deber del Estado y de los profesionales en salud que trabajan para él, respetar en todo momento como se identifica la persona.
Publicado por elmundo.cr